Típicamente, los alimentos procesados están llenos de azúcar, sal, preservativos y otros aditivos en exceso. Pero probablemente esto ya lo sabías. Lo que quizá no sepas es el alcance que pueden tener sus estragos, algo que la industria de comida procesada no quiere que sepas.
En pocas palabras, aunque sepan muy bien y sean fáciles de preparar, cuando comes alimentos preparados estas cambiando salud por conveniencia.
Donna Gates, autora de
The Body Ecology Diet, explica diez razones por las cuales deberías pensar dos veces la próxima vez que te veas tentado a comer alimentos procesados.
1. Son adictivos y pueden provocar que comas de más
Procesar modifica o remueve componentes importantes de la comida como la fibra, el agua y los nutrientes, cambiando la manera en que son digeridos y asimilados en tu cuerpo.
A diferencia de la comida cruda y entera, que contiene una mezcla de carbohidratos, grasas, proteínas, fibra y agua para ayudarte a sentir satisfecha, los alimentos procesados estimulan la liberación de
dopamina y te hacen sentir bien incluso cuando la comida no tiene nutrientes ni fibra. Esta liberación de dopamina puede llevarte a comer de más y, ultimadamente, a volverte adicto a la comida.
2. Están vinculados a la obesidad